¿Has sentido un calambre en alguno de tus músculos? Esta contracción o espasmo involuntario del músculo es muy común y se puede presentar después de hacer ejercicio o por la noche. En algunos casos duran algunos minutos y en otros solo unos segundos.
Los calambres pueden aparecer por un mal funcionamiento de un nervio o lesiones de la médula espinal. Otras causas pueden ser el uso excesivo de un músculo, deshidratación, falta de minerales en el cuerpo como calcio y potasio o una insuficiente irrigación de sangre en los músculos.
Una hernia discal puede presionar los nervios y provocar espasmos en la espalda. Si corres o saltas, los calambres se pueden presentar en la parte superior de la pierna. Si nadas, es común el calambre en la pantorrilla. Los calambres pueden ser muy dolorosos e intensos.
Para aliviar el calambre, es importante suspender la actividad que lo provocó y masajear el área, después, se puede aplicar calor para relajar el músculo y a continuación hielo que permita bajar la inflamación. Es muy importante tomar mucha agua y si esta no es suficiente, se puede requerir bebidas para deportistas que permitan recuperar los minerales perdidos en nuestro cuerpo.
Antes de hacer algún tipo de ejercicio, es muy importante estirar los músculos que se trabajarán de manera que haya mayor flexibilidad. Si la actividad física es intensa, incluir jugo de naranja y bananos en la dieta para aumentar la ingesta de potasio. Si los calambres son muy frecuentes, es importante visitar al médico para entender la causa de este problema.