El pancreas es un órgano muy importante en nuestro cuerpo. Este, permite que nuestro cuerpo absorba las grasas y digiera todos los alimentos a través de la secreción de enzimas y de insulina para controlar el nivel de azúcar en la sangre. El cáncer de páncreas no tiene una causa clara y su tipo depende de la célula donde se desarrolle. Es decir, puede ser adenocarcinoma (el más común), glucagonoma, insulinoma, vipoma.
Las personas que tienen más riesgo de padecerlo son quienes padecen de obesidad, una alimentación alta en grasas y baja en frutas y verduras, quienes sufren de diabetes, los fumadores o quienes hayan estado expuestos a ciertos químicos durante largos periodos de tiempo. Es más común en mujeres que en hombres pero el riesgo en ambos grupos aumenta con la edad.
El peligro del cáncer de páncreas es que normalmente no produce ningún síntoma al inicio, por lo que la persona puede pasar mucho tiempo sin conocer su estado. Cuando ya presenta síntomas, estos son los más comunes:
- Diarrea
- Orina ocura, heces color arcilla.
- Fatiga.
- Aumento del nivel de azúcar en la sangre.
- Color amarillento en la piel, ojos.
- Pérdida de peso y apetito.
- Comezón en la piel
- Agrandamiento del hígado.
- Molestia en la parte superior del vientre.
Cuando no se ha extendido el cáncer, se puede extirpar quirúrgicamente. En caso de que no se pueda extirpar el tumor o este haya llegado a otros órganos, es posible que el tratamiento se enfoque en mejorar la calidad de vida del paciente.
No hay forma de prevenir este tipo de cáncer, pero se puede reducir su riesgo. Lo más importante es dejar de fumar, mantener un peso saludable y evitar el excesivo consumo de grasas. El consumo excesivo de alcohol, también está relacionado con este tipo de cáncer.